
Preferiría no haber despertado,
haberte dejado allí,
tras la barra en mis sueños.
Saludarte con mi miedo
y esconder con timidez
un abrazo de sincera amistad.
Si hay más, no lo recuerdo.
El despertador ha hecho lo demás.
Escuha la playlist "No te sientes en la cama" aqui: https://open.spotify.com/playlist/6VRsJd2wrKOmbLjcW7oJnh?si=79e8db657bba428b
Hoy, y siguiendo un poco (pero solo un poco) con lo clásico (supongo que se enfadaría el autor por este adjetivo), os dejo esta obra maestra con la que según dicen los entendidos, se entra de lleno en la modernidad, en el impresionismo musical.
"Preludio a la siesta de un fauno", es un poema sinfónico para orquesta, basada en la égloga de Stepháne Mallarmé, a la que Debussy ilustra musicalmente. Fue en realidad el proyecto de una sinfonía de Debussy que se quedó solo preludio.
Bueno, como ya dije el otro día, vamos a ir un poco a los clásicos. En este caso, una marcha compuesta por Lully para la obra de teatro “El burgués gentilhombre” de Molière en el año 1670. Esta parte de la obra presenta al protagonista, el señor Jordain, un hombre rico pero ignorante y desesperado por subir en la escala social, al que un criado del novio de su hija, se hace pasar por un falso mensajero de un Gran Rey Turco. Alli le presentarían posteriormente a un príncipe turco, el cual desposaría a su única hija. El burgués no accedía al matrimonio de su hija Lucile con su novio de siempre – Cleónte - por no ser este, noble; y con esta farsa, su hija consigue finalmente casarse con su novio.
Este ballet cómico compuesto en prosa y dividida en 5 actos, fue representado en el Castillo de Chambord para el entretenimiento del rey el 14 de octubre de 1670 y presentada al público en París por primera vez en el Teatro del Palacio Real el 23 de noviembre de 1760, por la troupe del Rey (dirigido por cierto por el Marin Marais, discípulo del Violagambista Bernadine de Saint Colombe)
Información extraída de J.B. Lully Biography
Pues, parece que fue fue ayer, y sin embargo ha pasado un año ya. Hoy se conmemora el primer año de la muerte de Luciano Pavarotti, y como yo no me canso de escucharla, os dejo de nuevo este fragmento que me sigue y seguirá poniendo los pelos de punta.
Debería poner más opera ¿Verdad?
Por fin! Ha salido mi guitarra de la operación a corazón abierto. Después de un coma casi irreversible en el hospital, mañana vuelve a casa. Tres meses de espera e incertidumbre. Mañana la llevaré a casa y comenzará la rehabilitación. Puede que sea lenta, pero creo que quedará como nueva o mejor. Eso sí, ya puedo ir preparando la pasta para otra intervención. La siguiente es una protesis de cadera que tendrán que traer desde Alemania. Ahí es nada! Creo que en unos meses será capaz de volver a las andadas, y nos podremos decir lo mucho que nos hemos echado de menos.
Y como no podía ser de otra forma, en el día en que se celebra el aniversario del nacimiento de Mr. Mercury. Una canción que muchos de vosotros habréis interpretado en Play-Back con una raqueta de tenis en las manos, o al estilo Air-guitar.
Ahora reposo y medicación
Me ha fastidiado mucho no poder dejaros hoy una canción que tenía pensada con una dedicatoria a los amigos de la brigada de extinción de incendios de Belchite. Y es que no estaba la canción en el servidor, ni tenía forma de subirla yo. Así que como seguro que ya se me habrá olvidado para la próxima vez, pues aprovecho para dejar esta otra canción de otro grupo descubierto este año.
Y la canción va dedicada, entonces, para esos chicos que se juegan el tipo por 1.000 pavos y recorren los caminos polvorientos de la estepa de Belchite. Creo que este tema también puede ser apropiado como banda sonora de esos recorridos casi desérticos.
P.d. La foto no es de Oklahoma, sino de Las Lomazas (Belchite)
¿Hay alguien ahí? ¿Estamos todos? Bueno, hoy es uno de Septiembre y parece que la ciudad empieza a recobrar el ritmo normal. Los atascos, los ruidos, las colas en Tráfico y el paro, las tiendas abiertas y los bares de siempre, los amigos con resaca de las fiestas populares, las parejas, la piel bronceada. Los estuches nuevos (que a saber donde acabarán), los libros de texto, etc.
Estamos todos, así que podemos dar comienzo al nuevo curso musical. Hoy y para celebrarlo, me acompaña mi sobrino con sus pinturas, sus recortables de POCOYO, sus helados que escurren por el brazo hasta el suelo y su imaginación invulnerable. Y ha sido él, quien ha decido por dictadura infantil, que será hoy está canción y no otra la que sonará para vosotros (claro, elegida de entre otras dos propuestas mías)
Bienvenidos de nuevo al dormitorio.